miércoles, 27 de febrero de 2013

LOS MISERABLES


Los miserables es una adaptación al cine de la novela de Víctor Hugo, que se estrenó el  pasado diciembre.
Dirigida por Tom Hooper y protagonizada por Hugh Jackman, Russell Crowe y Anne Hathaway; es un musical en el  que grabaron las canciones en directo, mientras rodaban las escenas.
La película transcurre en Francia durante la época de la revolución francesa. El  protagonista, un preso que incumplió su libertad condicional y cambió su identidad, adopta a una niña, Cosette, tras prometer a su madre cuidarla antes de que esta falleciera. Al crecer, Cosette se enamora de uno de los líderes de la revolución francesa, que junto a su mejor amigo monta una barricada en plena calle a la que acuden muchos rebeldes.
Toda la película es cantada, con canciones alegres o tristes, tranquilas o furiosas…
Los miserables alterna cariño y amores no correspondidos, escenas de alegría con otras en las que te entran ganas de llorar, la injusticia de la sociedad con el  intento de igualdad por parte de los ciudadanos…
Tanto Hugh Jackman con Anne Hathaway han sido nominados a los globos de oro, como mejor actor y mejor actriz respectivamente. Los miserables también está elegida para mejor película musical y mejor canción original.
La película, que dura dos horas y media, resulta un poco larga y aburrida, porque, aunque las canciones son muy buenas, la película tiene poca acción, y se centra más en interpretar bien las canciones. Pero también es una película que emociona mucho, y ha tenido bastante éxito.
  

miércoles, 13 de febrero de 2013

UN PROGRAMA EN RADIO INTER

El  18 de diciembre Isidoro, nuestro profesor de periodismo, nos llevó a radio inter para grabar un programa en directo. El  mes pasado habían ido cuatro alumnos de tercero de la eso, y esta vez nos  tocaba a otras cuatro de segundo (Sara, Paula, Laura y yo).
A las nueve de la mañana un autobús del colegio nos llevó a los estudios de grabación de intereconomía. Allí se graba la radio inter, interpop, o el  canal de televisión de intereconomía.
Lo primero que hicimos al llegar fue grabar nuestro programa. Carlos Peñaloza y Maribel Berzosa estuvieron con nosotros. Cada una llevábamos cuatro o cinco artículos sobre diversos temas, y el guion de un debate conjunto. Carlos Peñaloza era el  presentador. Isidoro y Maribel Berzosa también hablaron, y comentaron los temas.
Solo nos dio tiempo a leer un artículo cada una, aunque también hablamos sobre muchas otras cosas. Sara leyó su artículo sobre como la música reduce el  abandono escolar. Luego salió el  tema de que todas participamos en el  coro del colegio, y tuvimos que cantar una canción. También aprovechamos para hacer publicidad sobre el  nuevo disco del coro. Paula habló sobre las nuevas tecnologías de Apple, como el  iPad mini o el  nuevo iMac. Laura sobre los tapones solidarios, como han conseguido cambiar la vida de muchas personas. Y yo sobre los microcréditos, unos pequeños préstamos que se dan a gente sin recursos, ni garantías de devolución, para que creen pequeñas empresas, sobre todo en los países más desfavorecidos.
La grabación del programa fue muy interesante. Al principio dieron las noticias y el  tiempo. Carlos Peñaloza dijo
el tiempo sin ningún tipo de guía, de memoria. Durante el  programa hubo varios descansos, en los que pusieron publicidad y, casi al final, vino un señor a promocionar un producto.
Después de despedirnos de Carlos Peñaloza y Maribel Berzosa, Juan Manuel Pozuelo nos llevó a visitar las instalaciones. Vimos cómo se preparaban para el  programa “doce mujeres sin piedad”, escribían los artículos para la radio o editaban las grabaciones para la tele.
Más tarde Isidoro nos invitó a almorzar en “el  plató”, un restaurante que tenía una gran ventana que daba a uno de los estudios de grabación del canal “intereconomía”. Todos nos pedimos un bocadillo y un zumo. Al poco tiempo empezó el  programa “dando caña”. Nuestra mesa estaba situada al lado de la ventana, y, asomándonos un poco, salimos de fondo en el  programa.
Sobre la una llegó el  autobús para recogernos, y nos subimos a él  con pena, tristes de que esta bonita experiencia se hubiera terminado.